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Argentina salvaje: Un viaje visual y sonoro por la belleza verde y la supremacía del mundo animal

La productora alemana Light & Shadow, Jumara Films y el director Christian Baumeister, estrenan la primera película nacional de fauna y biodiversidad para cines.



Por: Salvatore Laudicina

Colaborador Colombia

PEFF 2023


Un azul resplandeciente les da la bienvenida a los espectadores. Es allí, en el universo acuático, donde debe iniciar la travesía. Acto seguido, la voz de Chino Darín entra en escena como vehículo narrativo para presentar a una ballena franca austral y su cría, cerca de la costas patagónicas.


A medida que Darín cuenta, los lazos de afecto y crianza entre madre e hijo se entremezclan con la grandeza única de la naturaleza. Cuanto azul, cuanta pureza en las aguas de un mar que festeja el poderío y belleza que habita en Suramérica.


Christian Baumeister no pudo encontrar un mejor comienzo para Argentina Salvaje, un documental donde la fauna y la riqueza ecológica y biodiversad son los pilares de un mundo digno de preservarse.




Mientras los minutos transcurren, las imágenes nos llevan a redescubrir lugares míticos de la geografía gaucha y contemplar desafíos propios del mundo animal: Cazadores devorando a sus presas, la lucha por sobrevivir y las relaciones entre especies, se adueñan poco a poco del interés de quien observa.


Literalmente, los cuerpos desean traspasar la pantalla y sentir el ímpetu de las Cataratas del Iguazú para acariciar a los vencejos de agua que han encontrado allí su morada. También, adentrarse en la selva para convivir con los coatíes suramericanos y aprender de su cotidianidad.


Enamorarse de las distintas historias que componen este filme, es inevitable. La calidad y la estética abundan en el guión de Michael Mavretic, la cámara subacuática de Mariano Rodríguez y Santiago Cabral; y la musicalización de Oliver Heuss.



La dupla formada por la productora alemana Light & Shadow, fundada en 2001 por Christian Baumeister, y Jumara Films, vital para la materialización de la idea, cuidó hasta el más mínimo detalle de la preproducción, producción y postproducción.

La tecnología jugó un papel clave: cámaras de hasta 8K de resolución, macro- lentes extremas, cámaras de ultra alta velocidad y de visión nocturna y un registro de sonido envolvente 5.1. Los equipos perfectos para capturar imagen y sonido en alta definición.


Cabe mencionar la participación de reconocidos cineastas de Argentina, Chile, Uruguay y Brasil, quienes aportaron su visión y experiencia en distintos momentos de la filmación.


Más allá de entretener, Baumeister persigue un propósito más trascendental con la primera película nacional de vida salvaje que llega a las salas de cine: crear conciencia sobre la importancia de definir la fauna como un patrimonio vivo del país. Patrimonio que debe amarse, respetarse y protegerse para las nuevas generaciones.





Nadie, absolutamente nadie, podría ponerlo en duda después de ver las escenas de los pingüinos y leones marinos habitar el Área Natural Protegida Península Valdés; o la mirada impotente de quien presencia, mientras graba con la cámara, el fuego devorando a Iberá, el hábitat donde los carpinchos juegan y se alimentan en los humedales.


Y si alguien llegase a poner en tela de juicio el propósito de Baumeister en algún momento del filme, lo entenderá en los últimos minutos cuando conozca al valiente lobo marino, ejemplo de resiliencia y coraje, protagonista de una historia con un desenlace inesperado.


Para la familia del Festival Internacional de Cine Ambiental de la Patagonia (PEFF), es un placer exhibir esta película valiosa para la historia cinematográfica de Argentina.


Un viaje sonoro y visual a un país que enamora con su belleza verde y la supremacía del mundo animal.

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